Elegir un cepillo y una pasta dental depende de las necesidades de cada persona, sin embargo, desde Chafarinas vamos a explicarte las ventajas de entre la gran variedad de opciones existentes en el mercado para mantener una correcta higiene bucodental.
Partes de un cepillo de dientes:
- Mango: Debe ser antideslizante y ergonómico para lograr un buen agarre, lo más habitual es que sea de plástico, pero ahora nuevos modelos se utilizan materiales más sostenibles con el medioambiente.
- Capucha: Permite proteger tanto las cerdas como el cabezal, deben de tener unas pequeñas perforaciones que permitan mantener al cepillo aireado.
- Cabezal: Varía en función del tamaño, la edad de la persona que lo usa y la necesidad del mismo.
- Filamentos: Permiten eliminar cualquier posible residuo bucal. Normalmente, están fabricados con nailon, un material de dureza controlada.
¿Qué tipos de cepillos de dientes existen y cuál es mejor?
Tanto el cepillo de dientes manual como el eléctrico pueden ser eficaces para la limpieza dental siempre y cuando se utilicen adecuadamente, en otras palabras, con la técnica recomendada y durante el tiempo necesario para poder eliminar la placa bacteriana que pueda almacenarse en nuestros dientes.
Desde nuestros centros dentales recomendamos, siempre que sea posible, el cepillo eléctrico, pues ofrece una gran variedad de ventajas frente al modelo más tradicional, entre ellas destacamos:
- Realiza una limpieza mucho más profunda: Gracias a la velocidad de sus movimientos, el cabezal puede llegar a todos los rincones de tu boca, permitiendo un mejor mantenimiento de nuestros dientes. Por lo general, los cepillos manuales requieren de más tiempo para hacer una limpieza óptima, siendo, además, muy difícil de llegar a los niveles de profundidad del eléctrico.
- Eliminan la placa bacteriana más fácilmente: Debido al motor que tiene incorporado el cepillo es capaz de dejar a nuestros dientes libres de posibles bacterias, aun llevando mucho tiempo tu boca.
- Ayuda a la prevención de enfermedades: Al mantener los dientes más limpios y ofrecer una mayor profundidad con sus movimientos, tu cavidad oral estará sana y, por tanto, evitará padecer de gingivitis, caries, periodontitis o halitosis.
- Enorme variedad de modelos: Existen múltiples opciones dentro del cepillado eléctrico, pudiendo diferenciar, principalmente, entre sónicos y rotatorios.
Tipo de cepillos de dientes según su finalidad:
- Interproximal: Ideal para cualquier persona que desea eliminar la placa bacteriana y altamente recomendable para pacientes que tienen un tratamiento de ortodoncia con brackets, pues elimina a la perfección los restos de comida de sus piezas de una manera mucho más efectiva. Es destacable, también, la enorme variedad de modelos de este tipo de cepillo dental que logran adaptarse a las diferentes necesidades de los clientes.
- Periodontal: Se emplea para casos que ya sufren de una enfermedad periodontal, es decir, infecciones en los tejidos que sostienen nuestros dientes. El ejemplo más común es la inflamación gingival. Pese a que su uso más frecuente es el comentado, también se puede emplear en los más jóvenes que utilizan una ortodoncia fija.
- Postoperatorios: Recomendado tras intervenciones quirúrgicas, tales como extracciones dentales, cirugía periodontal, colocación de injertos e implantes dentales, entre otros muchos. Muy interesante también para pacientes con una higiene bucal delicada, presencia de aftas, irritaciones de boca y ausencia de alguna pieza dental.
- Infantiles: Para los más pequeños de la casa el tipo de cepillo recomendado es aquel que tenga un cabezal redondeado y con filamentos muy suaves, de hecho, en algunos casos no es necesario añadir pasta de dientes al cepillo, pues con un poco de agua es más que suficiente. Es a partir de los 3 años cuando se puede empezar a añadir pasta de dientes para evitar posibles casos de caries en los niños.
Según su funcionamiento:
- Manuales: Es, en otras palabras, el cepillo convencional, dependen de nuestro movimiento para lograr una correcta higiene bucodental. Tenemos a nuestra disposición una enorme variedad de modelos que se adaptan en función del tamaño de nuestra mano, al tipo de cerdas, la diversidad de posiciones en las fibras del cepillo y si lo queremos o no con un cabezal movible.
- Eléctricos: Ofrecen variedad de movimientos (giratorio, horizontal o sónico) e incluso posibilidad de combinarlos. Permiten una limpieza completa, pero su uso depende de batería.
Según su dureza:
- Cepillos dentales duros: Las cerdas son fuertes y rígidas. Se puede utilizar en bocas sanas y cuidadas que sean capaces de aguantar la presión sin problema, son recomendados para pacientes con encías gruesas.
- Cepillos dentales medios: Ideal para pacientes con una correcta higiene bucodental y que tengan una sensibilidad relativamente baja, pues sus cerdas suelen ser para muchos, todavía, duras.
- Cepillos dentales suaves: El más vendido y común, no genera excesiva fricción. Ideal para encías finas y con alta posibilidad de sangrado.
- Cepillos dentales extra suaves: Dirigido especialmente a pacientes con encías retraidas. Es el cepillo de dientes que se manda tras realizar un tratamiento de ortodoncia o blanqueamiento, para evitar posibles molestias.
Ahora que conoces con más detalle la importancia de los cepillos de dientes para mantener unos dientes saludables, te recomendamos que sigas profundizando con esta entrada de blog que te permitirá ampliar tus conocimientos sobre los más pequeños.
Si tienes dudas sobre cualquier aspecto mencionado o quieres conocer de primera mano nuestros servicios disponibles, no dudes en contactar con nosotros, te atenderemos con todo el gusto del mundo.
