¿Qué es la fisioterapia?
La fisioterapia es una profesión sanitaria que se encarga de recuperar y mejorar el movimiento del cuerpo y las funciones motoras, aliviar dolores y prevenir alteraciones físicas, mejorando así la calidad de vida de sus pacientes. Se trata de una serie de ejercicios que ayudan a estimular el cuerpo. El profesional a cargo es el fisioterapeuta que se encargan de realizar una evaluación del paciente y un diagnóstico, implementar un tratamiento y llevarlo a cabo. La rehabilitación es una parte muy importante de la fisioterapia, pues se encarga del tratamiento de las discapacidades derivadas de accidentes y enfermedades. En la actualidad, la fisioterapia es pieza clave de la medicina moderna gracias a sus tratamientos.
¿Para que sirve la fisioterapia?
Los usos de la fisioterapia van desde la prevención de lesiones a la rehabilitación corporal, pues ayuda a recuperar el movimiento muscular y corporal:
- Prevenir lesiones como esguinces
- Previene lesiones musculares
- Recuperación muscular
- Recuperar el movimiento muscular
- Tratamiento de recuperación después de una cirugía
- Cuidar huesos articulaciones y tejidos blancos
- Corregir postura o desequilibrios en los músculos
- Aliviar dolores localizados
Técnicas utilizadas en fisioterapia
Dentro de esta disciplina se utilizan diferentes técnicas según la necesidad del paciente. A continuación, te contamos cuales son:
Terapia manual
Permite a los fisioterapeutas la manipulación de músculos y tejidos con la finalidad de aumentar el flujo sanguíneo, mejorar la movilidad y provocar una relajación muscular. Entre las técnicas de terapia manual destacamos:
- Masaje terapéutico.
- Movilización articular.
- Drenaje linfático.
- Relajación miofascial.
- Neuro dinámica
- Técnicas de energía muscular
Otras técnicas consideradas dentro de la terapia manual pueden ser:
- Punción seca
- Vendaje muscular
Cinesiterapia
Tratamiento basado en movilizaciones musculares que facilitan al paciente la recuperación de la sensibilidad motora. Siendo, en otras palabras, la reeducación muscular a través del movimiento.
Masoterapia
Sirve como prevención ante cualquier posible muscular, se aplica un masaje en determinadas áreas y evita, en cierto modo, la aparición de lesiones inesperadas.
Se trata de una opción ideal para aquellas personas que realizan deporte con regularidad.
Mecanoterapia
Empleada en personas que se encuentran en proceso de rehabilitación, consiste en tratar al lesionado o enfermo con instrumentos mecánicos. En la mayoría de los casos funciona mejor cuando convive con una terapia complementaria.
Electroterapia
Consiste en un tratamiento fisioterapéutico que emplea corrientes eléctricas para estimular y tratar determinadas áreas musculares. Dicha acción logra desencadenar una respuesta fisiológica que lleva consigo un efecto terapéutico.
Existen numerosos dispositivos terapéuticos que consiguen acelerar el proceso de reparación muscular, entre los que destacan:
- Electro analgesia
- Electroestimulación
- Radiofrecuencia
- Presoterapia
- Magnetoterapia
- Neuro modulación
- Diatermia
Agentes físicos: crioterapia y termoterapia
Existen diferentes formas para aumentar, termoterapia, o reducir, crioterapia, de la temperatura tisular, aunque todas ellas tienen como finalidad actuar como analgésico al dolor, centrados, en definitiva, en ayudar al proceso de reparación muscular.
¿Cuándo tengo que ir al fisio?
Estamos acostumbrados y hemos normalizado visitar al fisio cuando empezamos a sentir cualquier tipo de molestia o, incluso, cuando directamente tenemos una lesión. Sin embargo, la prevención y el tratamiento regular por parte de un profesional siempre será la opción más acertada dado que nos permite evitar posibles lesiones o patologías.
Un fisioterapeuta no solo nos ayuda con su tratamiento manual o mediante maquinaria, sino que también nos indica cómo mantener la postura correcta o la movilidad de las articulaciones.
Recomendamos, encarecidamente, acudir a un especialista, como mínimo, una vez al mes. Cualquier persona, independientemente de la edad, puede beneficiarse al realizar una visita al especialista.
Todo profesional de medicina física y rehabilitación promueve hábitos de vida saludables, corrigen posturas y nos indican como realizar movimientos de una manera correcta. Hay que entender que no solo va a actuar como tratamiento ante una lesión o molestia, sino para prevenir a las mismas.
De igual modo, si has sufrido en el pasado alguna lesión o molestia muscular, si prácticas algún deporte, no tiene porque ser de manera profesional, o bien tiendes a tener problemas derivados de una incorrecta postura corporal, sin duda acudir a un especialista es la mejor opción tanto a corto como a largo plazo.
¿Cuándo es mejor no ir al fisio?
En aquellos casos en los que además de dolor tienes fiebre, puede que el dolor sea consecuencia de una gripe y dar lugar a un malestar general, por lo que los síntomas pueden proceder de dicha enfermedad infecciosa. Lo recomendable es esperar a que estemos recuperados para ver si ese mal persiste para poder ir al fisio.
Supongamos que hemos sufrido un accidente laboral o hemos tenido un fuerte golpe que ha provocado que alguno de nuestros huesos haya salido de su posición natural. Lo ideal es acudir a urgencias y que lo vuelvan a colocar, para seguidamente recibir un tratamiento rehabilitador que fortalezca la musculatura y nos permita ir recuperando la movilidad total de la zona afectada.
En términos generales, acudir con una patología previa, que no esté asociada a problemas que puede controlar un fisio, no es lo más aconsejable. Pues nuestro cuerpo y, por tanto, nuestro sistema inmunológico estará haciendo frente a otra enfermedad provocando que las terapias no reaccionen de la forma en la que deberían.
Para finalizar, queremos remarcar la importancia que tiene recibir sesiones en el fisioterapeuta. Por ello, no dudes en consultar con nuestros especialistas cualquier duda respecto al tema. Si necesitas cita puedes contactar con nosotros, además de consultar el resto de nuestros servicios.
